jueves, 29 de noviembre de 2012

Sí claro, cómo no.

¿Qué será de esos sueños olvidados? Tal vez gritan desesperadamente desde el fondo de nuestros recuerdos tratado de volver en gloria y majestad. Ahora, ¿qué será de las personas que han olvidados sus sueños? Creo que soy nadie como para responder esa pregunta. A lo corto de mi vida no he tenido otros sueños que los típicos sueños adolescentes, excepto uno: felicidad.
¿Qué es la felicidad? Difícil pregunta, ya que las respuestas pueden ser millones. La felicidad es algo que no se puede describir, describir es limitar y la felicidad no conoce límites. ¿Qué es la felicidad para mi? Ahora sí, la respuesta es más básica: no lo sé. Mi felicidad es cambiante; dependiente; rara, frágil. Cambiante como todo; dependiente de dos cosas; rara como yo; frágil como la confianza. 
Frágil como la confianza... Frágil
















¿Huyamos? 

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